4 GB: Tareas básicas (navegar, correo, procesamiento de texto). Ideal para usuarios ocasionales.
8 GB: Multitarea moderada, edición de fotos y aplicaciones de oficina. Ideal para usuarios que realizan tareas diarias.
16 GB: Aplicaciones exigentes, diseño gráfico, juegos modernos. Ideal para profesionales y entusiastas.
32 GB: Trabajo con bases de datos grandes y edición de video en alta resolución. Ideal para tareas intensivas.
64 GB: Estaciones de trabajo y aplicaciones complejas. Ideal para especialistas y trabajo con software avanzado.
Los procesadores para laptops varían en rendimiento y capacidades según las necesidades del usuario.
Intel Core: Ofrecen un equilibrio entre rendimiento y eficiencia energética, ideales para tareas cotidianas como navegación, ofimática, multimedia y juegos ligeros. Además, son eficientes en consumo energético, lo que mejora la duración de la batería. También están optimizados para programas de edición de video y diseño gráfico.
¿Qué considerar?